Las principales condiciones requeridas para gozar de este regalo fiscal son : haber sido residente en el extranjero durante por lo menos 9 de 10 últimos años… y haber de rentas suficientes para que un impuesto de 100.000 euros apareciera como un buen negocio. Para las grandes familias, una cláusula permite instalar también la residencia fiscal de su allegados para un suplemento de impuesto de 25.000 euros por persona.